Bien conocidas son las peripecias que deben sufrir los jubilados para conseguir un turno en algunos sanatorios y clínicas privadas como para abundar en ello, pero el Sanatorio San Martín, de Venado Tuerto, se las ingenió y le encontró una vueltita más…
Las recetas que los jubilados deben solicitar todos los meses son, de por si, un engorro, mire por dónde se mire. El sanatorio en cuestión implementó, ya hace tiempo, un sistema que a simple vista parece de lo más sencillo: el jubilado o su familiar va hasta la institución, levanta una planilla, llena la misma con los datos del médico de cabecera, los datos del beneficiario y los medicamentos que necesita, los deja en una urna y luego pasa a retirarlos. Parece simple… Sólo PARECE…